¿Has pensado hasta qué punto cambiaría tu estado de ánimo y tu forma de vivir si te sintieras bien con la imagen que ves cada día en el espejo?

Es imposible calcular el valor que tiene la autoestima y la seguridad en uno mismo.  Y también es impagable el alivio de dejar de disimular un problema que te acompleja y te limita.

Porque es algo estético, de acuerdo.  Nadie niega que no está en juego nuestra salud física.  Pero sí lo está nuestro estado de ánimo y nuestra felicidad.  Y eso no es algo banal.

Tú decides si este es el momento adecuado para solucionar tu problema y volver a sentirte bien contigo.

La pérdida de cabello puede tener varias causas, genética, hormonas, estrés, etc… como cualquier otro problema que afecta a nuestra salud cambiando nuestro aspecto físico.

En muchas ocasiones provoca cambios en el estado anímico de quien lo padece:

• Nos vemos mayores y no nos gustamos.
• Afecta a nuestra autoestima y nos sentimos inseguros.
• Es un proceso que no podemos controlar y nos genera ansiedad e impotencia.

Esto hace que nos pasemos el día intentando disimular este problema porque nos acompleja y nos cohíbe en nuestras relaciones personales.  ¿Te sucede esto?

Si no nos reconocemos en el espejo, si la imagen que vemos reflejada no nos gusta, nuestra autoestima baja, nos sentimos inseguros y nos falta la confianza para afrontar con fuerza el día a día.